
otras veces te querés ir rápido sin mirar demasiado.
Viajar por uno mismo sirve para despertar aspectos dormidos, conocerse mejor, iluminar zonas oscuras.
En el mejor de los casos la experiencia de intimidad en el vínculo terapéutico habilita un volver a nacer, propone un nuevo hábitat afectivo con el plus de lo ya vivido.
Hacer terapia es darse la posibilidad de volver a empezar, de dar otros pasos, de descubrir nuevos caminos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario